Nuestro cine es diverso en lenguas, géneros y estilos porque es fruto de la complejidad que nos configura como cultura.
Y nuestros festivales no sólo son diversos por naturaleza, sino que hacen claras apuestas por la diversidad. Este es el caso del FESTIVAL GAY Y LÉSBICO DE CATALUÑA, que ya hace quince años que funciona y que demuestra que la diversidad en todos los sentidos no se tiene que entender como un estorbo, sino como una riqueza. Que la excelencia de vuestro trabajo haga caer los prejuicios que todavía existen sobre la libertad sexual de las personas.